CONSIDERACIONES SOBRE LOS TRENES EN GRAN CANARIA Y TENERIFE
Llevamos unos cuantos años de promoción para la introducción del tren en Canarias, incluyendo una exposición de una maqueta de locomotora en el parque de San Telmo de Las Palmas de Gran Canaria, en 2009. El último acto es la firma de sendos convenios entre, los Cabildos de Gran Canaria y Tenerife, el gobierno de Canarias y el Estado para impulsar los trenes en ambas islas uniendo las respectivas capitales con las urbanizaciones del sur turístico.
Desde luego, a pesar de los años que lleva rondando la idea sobre Canarias, más de 16, no se ha realizado un proceso de participación ciudadana al respecto, aunque al igual que ha ocurrido en multitud de proyectos de alto impacto en nuestro archipiélago no se le espera. Parecen insuficientes algunos procesos de "Participación Ciudadana" abiertos, por ejemplo, por el Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria. Podemos mencionar, por reciente, el caso del proyecto para el barranco Guiniguada. Esta participación se vió condicionada al tratarse de paquetes ya cerrados, por un lado, y que esta participación solo influye o influyó en el 10% de la decisión. En fin, con esto queda todo dicho.
En el caso de Gran Canaria, el coste de la instalación de esta infraestructura se estimó en 1650 millones de euros, según presupuesto de la empresa pública estatal Ineco, aunque, desde luego, los costes serán mayores al "actualizarse" los precios. El propio Cabildo de Gran Canaria estima en 2.000 millones el coste.
Por otro lado, el consumo de suelo resulta muy elevado. Supone una plataforma nueva, con sus estaciones asociadas, lo que afectará a suelos de gran importancia estratégica en la costa oriental de Gran Canaria y Tenerife. Esta situación dará lugar también a un aumento de la masificación territorial que ya sufrimos. Si bien se trata de una zona con alta densidad edificatoria, con una vía de alta capacidad, la GC-1, en el caso de Gran Canaria, también es cierto que existen grandes bolsas de suelo agrícola en abandono de importancia estratégica que no se tienen en cuenta sino como bolsas para edificar salvo en casos puntuales en los que se ha frenado su destrucción.
En estos casos se incluye la zona de cultivo platanero que los tribunales impidieron que se destruyera para hacer pasar por este sector al sur del núcleo aruquense de Bañaderos la GC-2, en el marco de la pretendida Variante de Bañaderos, que el gobierno de Canarias se empeñó en mantener y derribada, como decimos, por los tribunales a pesar de los varios recursos pagados con fondos públicos.
En el caso del tren se aprecia la misma voluntad de eliminar los molestos terrenos agrícolas dentro del mismo sistema turbodesarrollista exógeno que lleva a la masificación total del territorio canario.
En todos estos años, y en muchos anteriores, no se han puesto en marcha alternativas más económicas e integradas, para mejorar el transporte público en el corredor oriental de ambas islas capitalinas sino que es endémica la vía hacia macroproyectos costosos, tanto en lo económico como ambiental, social y cultural. Un ejemplo de esto lo vemos en la autovía que unirá Agaete con La Aldea a través del Parque Natural de Tamadaba, sin explorar alternativas menos costosas e impactantes.
El actual servicio de guaguas es rápido, incluso temerario en ocasiones, lo que hace pensar en que quizás fuera suficiente con ampliar su frecuencia incluso habilitando un carril exclusivo especialmente útil en las horas punta de mayor tráfico. Desde luego se hace necesario mejorar las conexiones con las paradas que pasen por la autovía respectiva para facilitar el acceso de la población. Todo ello con un coste infinitamente menor a todos los niveles.
En otro orden de cosas, en el fondo relacionado estrechamente con las anteriores, se encuentran los beneficiarios de una obra de tal calibre que serían empresas foráneas, salvo alguna pequeña concesión como asfaltar los accesos a las estaciones de tren y poco más. Como es lo más común, extracción de rentas con el añadido de un aumento de la masificación del territorio.
Comentarios
Publicar un comentario